¿Puede ser espiritual alguien que va a misa todos los domingos, pero miente constantemente?, ¿Es espiritual alguien que ora, pero que trata agresivamente a los demás? ¿Es espiritual la persona que se hace daño a sí mismo y que no se conoce?, ¿Es espiritual aquel que guarda rencor y rabia en su corazón?. La respuesta a todos estos cuestionamientos desde mi perspectiva es no, ya que hay una desconexión con el amor y por ende, no hay armonía con el interior y mucho menos con el exterior, es decir, con el universo.
Muchas personas suelen concentrarse en los bienes materiales, en lo que es físico o lo terrenal y no se dan cuenta de lo fundamental que es conectarse con el mundo espiritual, aquello de lo que se nutre nuestro ser.
Si quieres integrar una práctica espiritual a tu vida, pero no sabes qué es y cómo hacerlo, a través de este artículo quiero compartirte algunos tips que a mi me han funcionado y que muy posiblemente a ti también.
¿Qué significa espiritualidad?
Muchas personas han considerado que espiritualidad y religión son lo mismo. Sin embargo,no lo son. Voy a explicarte de manera sencilla las diferencias entre estos dos conceptos:
Religiosidad es:
- Acoger una doctrina, ideas y enseñanzas.
- Formar parte de una institución que tiene jerarquías, ritos y celebraciones.
- Hay muchas alrededor del mundo.
- No indaga ni cuestiona.
- Te busca para que creas.
- Sigue preceptos de un libro sagrado.
- Te hace vivir en el pensamiento.
- Es para aquellos que buscan ser guiados.
- Adoración.
Espiritualidad es:
- Transformación interior: Conexión y conocimiento de sí mismo.
- Tener valores y convicciones en armonía con el universo. Siempre llevados en acciones.
- Hay solo una y está en el interior de cada ser.
- Lo cuestiona todo.
- La tienes que buscar tu.
- Buscar lo sagrado en todas las enseñanzas espirituales.
- Te hace vivir en la consciencia.
- Es para aquellos que escuchan su guía interior.
- Meditación.
Pueden existir personas religiosas, no espirituales y viceversa. También personas religiosas y espirituales. ¿Tu cuál eres?
Cuando realmente estás conectado(a) con tu espiritualidad empiezas a vibrar en el amor, a desarrollar tu intuición, a disfrutar del aquí y del ahora, experimentas lo que significa empatía y compasión. Comienzas vivir en armonía con el universo. Eres más consciente de tus acciones, dejás de actuar en automático y realizar realmente lo que te gusta.
Tips para conectarte con la espiritualidad:
Te voy a compartir algunas recomendaciones que te permitirán llevar una vida espiritual. Existen muchas más, pero te voy a compartir las que a mí más me han funcionado más:
- Agradecimiento constante: diariamente agradece por tu vida, porque despertaste, porque respiras, por los alimentos que consumes, por las personas que te rodean, por la situaciones que están pasando, independientemente de que sean agradables o no en este instante.
- Amor propio y hacia los demás: ámate a ti mismo, trabaja en la empatía hacia los demás, desarrolla la compasión y la capacidad para servir a otros seres. .
- Conéctate con la naturaleza: sal de tu espacio habitual y ve a un parque, a un lago a un bosque, a cualquier lugar donde puedas respirar aire puro.
- Déjate sorprender: detén tu rutina diaria y abraza el mundo que te rodea. Contempla las aves, las flores, las calles por las que transitas. Reprogramate para activar tu capacidad de sorpréndete como lo hace un niño. Hay muchas cosas que quizás hayan pasado por desapercibidas, pero que te podrían sorprender si tomas consciencia de ellas.
- Perdona y libérate de ataduras: sana tu corazón, no te aferres a situaciones que te generan sufrimiento. El acto de perdonar es interno, no es necesario decírselo a quien te hizo daño. Cuando decides perdonar, tú cambias, logras sanar y ver las situaciones desde otra perspectiva.
Puedes leer mi artículo sobre cómo librarte del apego
- Abre un espacio en tu vida para tu conexión espiritual: te recomiendo buscar un espacio en tu casa y construir un pequeño altar. Un lugar en el que te conectes con tu ser superior, Dios o como lo desees llamar. Aquí puedes meditar o orar.
- Aprende a respirar: empieza a tomar consciencia de tus respiraciones. Procura que cada vez sean más y más profundas, buscando que tu cuerpo se relaje y que tus pensamientos y emociones fluyan. ¡Vuelvelo un hábito!
- Realiza prácticas que te conecten con tu mente, tu cuerpo y tu espíritu: puedes meditar, practicar yoga, tai chi, masaje tailandés, orar o asistir a retiros de espiritualidad y/o sanación.
Finalmente, si empiezas a abrirte a la espiritualidad, descubrirás lo que significa conectarte con la más profundo del ser y con tu propósito de vida. Créeme, tu vida no será la misma.
Si tienes alguna duda o si quieres que profundice en algún tema, escríbeme. Estoy a tu servicio.
Katherine Moreno
Coach y Master en PNL avanzada.
Profesora de vinyasa krama yoga.